En el Ferrari 2015 el componente que sobresale no es el morro, si no la ausencia del equipo italiano en el sistema pull-rod para la suspensión delantera. Los ingenieros de la Scuderia han refinado algunos detalles, aunque en esencia se asemeja al mismo modelo.
El secreto de Ferrari ya ha sido revelado. El novedoso Cavallino Rampante, el vehículo que conducirán Sebastian Vettel y Kimi Raikkonen en 2015, el proyecto 666, SF15-T, ya se presentó. Con un diseño semejante al del año anterior, la escudería desea regresar a mandar en la Fórmula 1 y por eso ha realizado la renovación de todas las estructuras de un equipo que dejó síntomas de estancamiento en el transcurso de la etapa de Fernando Alonso como líder en la pista.
Existe un nuevo jefe de equipo (Maurizio Arrivabene), reciente presidente (Sergio Marchionne) y, en especial, nuevo piloto estrella. Se trata del tetracampeón a nivel mundial con Red Bull. Y junto a él, el finlandés Raikkonen, quien se encuentra a disposición para mejorar (y no debería ser complicado) su funesta campaña en 2014.
En el Ferrari 2015 el componente que sobresale no es el morro, si no la ausencia del equipo italiano en el sistema pull-rod para la suspensión delantera. Los ingenieros de la escudería han refinado algunos detalles, aunque en esencia se asemeja al mismo modelo.
Este es, justamente, una de las divisiones que más padeció Kimi la pasada temporada y, de acuerdo a Autosprint, presentó quejas frecuentes de su «falta de precisión delantera, que es una característica de la suspensión pull-rod». El piloto finlandés, aún así, expresó últimamente que no espera contar con las dificultades de 2014. «Este año es diferente, el coche es diferente, por lo que no espero tener una temporada similar», indicó.
El morro, como los demás equipos, es mucho más bajo que en 2014. El de Ferrari, como el de Sauber, dispone de un gran volumen y es extenso, diferente a muchos otros diseños que han optado por estilizar la punta del auto. «No puedo esperar para ver cómo se siente al conducirlo», declaró Vettel, que ya ha estado siguiendo los mandos del nuevo bólido en los test de pretemporada en Jerez.
«Estoy convencido de que vamos en la buena dirección, pero sería erróneo esperar mucho de nosotros», expresó con prudencia el alemán. Ferrari, el equipo más triunfador y más antiguo, que posee 15 títulos de pilotos y 16 de constructores en la F1, finalizó cuarto el año anterior, sin gozar de la capacidad para seguirle el ritmo a Mercedes. «Si la situación es como el año pasado, será muy difícil luchar realmente por las victorias, pero por supuesto que es nuestra meta y es por eso que estamos aquí», agregó Sebastian.
El director del equipo, Maurizio Arrivabene, manifestó, parafraseando a Enzo Ferrari, que el «mejor coche es el coche ganador». «El año pasado tuvimos un coche feo que además no era ganador. Me gusta el monoplaza de este año, en términos de estética. No sé que rendimiento tendrá, pero es muy sexy», aseguró.